-¿Por qué el destino o la vida te puso en mi camino, si no eras para mí?

Todavía hoy después de tanto tiempo me sigo preguntando una y otra vez lo mismo. -¿Por qué el destino o la vida te puso en mi camino, si no eras para mí? Es algo inexplicable como de la nada llegaste y de la nada te fuiste, dejando un hondo vacío en mi corazón, aunque me hayas hecho daño y me hayas mentido sigo pensando en ti, como el primer día que te presentaste en mi camino, como olvidar ese hermoso día el cual me di cuenta que existía un ser tan maravilloso dentro de este mundo lleno de codicia y maldad, pero me deje deslumbrar por tu belleza y tus palabras, no logre divisar tu verdadero ser, detrás de esa perfecta mascara tuya.

Mis ojos se cegaron en los tuyos, mis oídos se maravillaron, mi piel moría por tocarte y mis labios anhelaban poseer y amar tus labios, que con tanta facilidad narraban versos que solo un dios como tu puede crear; Mi error tal vez fue ese creerte un dios y ser una diosa a tu lado y dejar que mi corazón sintiera y viviera emociones jamás vistas por el hombre, que son tan imposibles para ellos, como alcanzar el sol, solo dos dioses como tú y yo podríamos experimentar tal amor que quemaba nuestro ser y solo se liberaba al caer en el mejor de los placeres, nos demostrábamos tal amor ancestral con besos, caricia, palabras y hechos.

Pero fue tan grande ese amor y lo demostramos tan bien, que se acabó como empezó de la nada, pero aun así no puedo creer que eso ocurriese, que un amor de dioses de acabara y que otra haya usurpado mi lugar a tu lado y te hayas marchado con ella una simple humana que no alcanza a sentir todo lo que yo podía sentir por ti, pero aun así te diste media vuelta y te despediste con un frió adiós y un abrazo que sello mi vida; Dejándome sola y desolada después de tu partida, te anhelaba como el sol anhela algún día alcanzar su bella dama de noche la luna, me dejaste como si nunca hubiera significado nada en tu vida, tal vez fue así pero me niego a creerlo después de tan bellos momentos a tu lado y de tan dulces palabras que todavía están clavadas en mi pecho. Mi vida después de eso no importa y el antes son solo recuerdos borrosos.

Extraño tus caricias, tus palabras, tus besos, tus voz, tus ojos, extraño cada parte de ti y realmente lamento y lloro el hecho que yo no fuera eso que tu buscabas, eso que yo encontré en ti.