¡Colapso!


No sé cómo los seres humanos podemos experimentar  tantas emociones a la vez, lloramos, reímos, nos enfadamos, odiamos, amamos, enloquecemos, sentimos impotencia, nos decepcionamos, vivimos múltiples alegrías y tristezas, dolores y de mas todo en un solo cuerpo, todo en un solo corazón, todo en un cerebro que es el culpable de estas emociones; Nunca sabremos por qué sentimos todo esto, ni porque sentimos todas al mismo tiempo llegada una cierta etapa en nuestras vidas, lo único que podremos saber es que tenemos que vivir con ellas desde que nacemos hasta que morimos, al pasar del tiempo nos acostumbramos a ellas, pero hay momentos en la vida que colapsamos y nuestras emociones son más fuertes que nosotros mismos algo que sin pensarlo sucede y llega en los buenos momentos de la vida.
Ahora mismo estoy experimentando uno de esos momentos en los cuales colapsas y no puedes soportar más lo que ocurre a tu alrededor, lo único que esperas al llegar este punto es solo desistir de todo, de todos y solo dormir para olvidar que existes y mermar un poco lo que sientes porque ni durmiendo puedes borrar esos sentimientos solo se apaciguan y se manifiestan por medio de tus sueños o pesadillas, algo mucho más trágico porque ya no solo sientes impotencia, si no que visualizas tu ruina total y sientes que solo has fracasado en esta vida aunque hayas vivido un tercio de lo que naturalmente los humanos vivimos en este universo; Al final de nuestro colapso lo único que esperamos es dormir pero no solo un sueño de siete u ocho horas, esperamos un sueño eterno que nos acobije acompañado de la hermosa muerte con su velo negro de seda, como si fuera nuestra cobija para resguardarnos del frio perpetuo.
Ahora bien, en estos momentos eso es lo que pensamos o deseamos, pero no todo lo que queremos se nos concede y esto es una de esas cosas, simplemente la vida nos pone pruebas como el colapso absoluto para ver si nosotros valemos la pena, ya que en estos momentos tu elijes la vida o la muerte, muchos de nosotros elegimos la vida a pesar de tanto dolor, sufrimiento y ese maldito sentimiento de soledad infinita que nunca se va, aun así unos pocos de nosotros deciden sucumbir a este colapso e irse antes de lo pensado con nuestra hermana la muerte; Yo sería una de esas personas que sucumben a la idea de irme con la muerte, pero aunque me duela mi situación actual y esté totalmente destrozada tanto por dentro como por fuera, sé que tengo muchas personas que necesitan de mi ayuda, ya que suelo ser la que les ayuda arreglar y afrontar este tipo de cosas, aunque ni yo misma pueda con las mías esto puede ser bastante cómico pero así es, me necesitan tanto mis amigos como mi familia, aunque estoy segura que muchos de ellos no serían capaces de cruzar por esto y no harían lo mismo por mí, no importa suelo ser una persona que le gusta ayudar a las demás sin importar que yo este peor; Mi soledad esa que tanto odio, pero que en muchas veces es la única que me acompaña es todo lo que tengo y es con lo que mejor me conecto, hay momentos de mi vida que solo quiero estar sola, afrontar y superar mis depresiones existenciales para no dañar a las personas que están a mi alrededor, me consideraría una persona valiente pero soy una cobarde que solo esconde sus tristezas y vive con ellas acuesta.
Vivo con mi colapso, lo afronto, lo guardo y aprendo de él aunque cada vez valla perdiendo un poquito más de mis sentimientos y mi delicadeza al hacerlo; Siempre recuerda que hasta la mejor sonrisa puede ocultar un corazón sin vida, pero mi sonrisa no te miente puedo ser feliz y olvidar mis problemas y mis temores, pero son momentos fugaces de una felicidad incompleta que anhelo alcanzar al final de mis días. ¡Mi mayor meta ser feliz!



Comentarios

Entradas populares de este blog

-¿Por qué el destino o la vida te puso en mi camino, si no eras para mí?

Sentimientos desbordados

Mil pedazos